Organizaciones de la sociedad civil, comunidades locales, entidades gubernamentales y organismos de cooperación se reunieron en el tercer foro sobre la Restauración de manglares: gobernanza, técnicas de restauración y cambio climático con el objetivo de intercambiar y documentar experiencias sobre este tema.

Dato importante:

En el año 1950 El salvador contaba con 100’000 hectáreas de bosques de manglar; hoy esa superficie se ha reducido un 50%, debido a causas naturales y sobre todo a la intervención humana. Mientras el incremento del nivel del mal está provocando un asolvamiento en la playa, los ríos, que drenan hacías los manglares, están siendo contaminados por basura y otras sustancias. Debido al mal tratamiento del agua, los bosques están enfrentado a una situación de estrés hídrico, donde el agua dulce no llega al manglar a causa de actividades extractoras y diques, lo que provoca disminución del caudal y pudrición.

De cara a esta situación de amenaza a los ecosistemas de la costa, las comunidades se organizan para la protección y restauración de los bosques de manglar. Rigoberto Monte, vicepresidente de Istatén (Asociación Ambiental Marino Costero de Ahuachapán Sur), comenta sobre el trabajo que se está realizando en el manglar de Garita Palmera y Bola de Monte: “Como asociación de la comunidad reforestamos las zonas críticas de nuestras comunidades, nos organizamos en grupos para recolectar candelillas en zonas cercanas, y tenemos un grupo de vigilancia para cuidar lo sembrado para que no sea maltratado. También hacemos canales para que pueda ingresar el agua y regar el manglar, que sirve de alimento para la familia ya que ahí se crían camarones y peces”.

Cómo parte del evento, el viceministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Ángel Ibarra, presentó avances en el fortalecimiento de modelos de gobernanza y técnicas de restauración del manglar en todo el país, como técnicas de regeneración natural para lograr ecosistemas de humedales auto sostenible. Además, MARN y la Universidad de El Salvador presentaron avances en la cuantificación de carbono azul en los manglares de la Bahía de Jiquilisco y Estero de Jaltepeque, lo que permite priorizar áreas de restauración.

El foro contó con la participación de representantes de instituciones gubernamentales, municipalidades, organismos no gubernamentales, asociaciones y grupos comunitarios que aprovechan los recursos del manglar, entidades financieras ambientales y agencia y programas de la cooperación internacional.