A lo largo del presente año, los diferentes precios de la canasta básica y servicios han experimentado incrementos sustanciales que afectan el bolsillo de la población. La Mesa por la Soberanía Alimentaria, de la que la Unidad Ecológica Salvadoreña es parte, ha expuesto cada uno de los aumentos en necesidades de los salvadoreños y salvadoreñas. 

Este incremento de precios  ha alcanzado su nivel más alto entre los meses de  mayo y junio, incrementando el coste en otras  necesidades para la población;  como el gas propano, gasolina, energía eléctrica, materiales de construcción y la canasta básica. La Defensoría del Consumidor (DC) informó del aumento de hasta un 34% de este último, a lo cual el Ministerio de Agricultura adjudica que poco se puede hacer para regular estos precios. 

Luis Gónzalez, Coordinador de incidencia de UNES, comenta los efectos de este fenómeno en la economía y la deficiente reacción de las autoridades

“Sin duda eso produce un gran impacto en la soberanía alimentaria de la población e impacta a la población más pobre y vulnerable. En ese sentido la exigencia es que desde el Estado, específicamente desde el Gobierno, ejecute políticas públicas encaminadas a resolver esta crisis”. 

Además, ante el creciente número de acuerdos entre el MAG y empresas distribuidoras de agrotóxicos, se denuncia y recuerda los efectos dañinos de estos venenos en la salud de los agricultores y personas aledañas a donde se realiza la fumigación. 

Estos plaguicidas fomentan un desarrollo más acelerado de enfermedades crónicas en las personas que están expuestos a sus compuestos agroquímicos. Tal es el caso de Oscar Grande, habitante de San Luis Talpa, quien asegura que desde hace años, pobladores del lugar, como él, sufren de enfermedades crónicas como la insuficiencia renal. 

“La zona ha sido afectada por la consecuencia de usos de madurantes como el glifosato, acelerando los efectos de la  insuficiencia renal, por la contaminación referente a los riegos manualmente y aéreos. 

“Muchas familias han sido afectadas, yo he venido luchando con este problema desde el 2015 y venimos al hospital dos veces por semana para los tratamientos. Cada día la vida se va poniendo más difícil, se va poniendo más cara para poder salir adelante con la enfermedad, porque los insumos y medicamento también van subiendo y eso no puede faltar, lo que es referente al agua, los recibos incrementan cada vez” comenta Oscar. 

UNES, como parte de la Mesa por la Soberanía Alimentaría, se encuentra comprometida en la lucha por la prohibición y eliminación absoluta del uso de agrotóxicos en el país. Exigen  a las  autoridades  hacer una correcta regulación en los precios de canasta básica, servicios y necesidades primarias de la población salvadoreña